Fiesta de los Santos Ángeles Custodios o Ángeles de la Guarda, son los mensajeros de Dios, se encargan de cuidarnos en la Tierra y guiarnos hacia el Cielo
Santos Ángeles Custodios: Los Ángeles de la Guarda.
La Fiesta de los Santos Ángeles Custodios, o fiesta de los Ángeles de la Guarda, es un memorial de la Iglesia Católica oficialmente observado el 2 de octubre. El ángel de la guarda es un ángel que está asignado para proteger y guiar a una persona en particular, grupo, reino o nación. La creencia en los ángeles custodios se puede rastrear a través de toda la antigüedad.
Fiesta: 2 de octubre.
Martirologio romano: Memoria de los santos Ángeles Custodios, (conocidos como Ángeles de la Guarda), quienes, llamados en el primer lugar a contemplar el rostro de Dios en todo su esplendor, también fueron enviados por el Señor a los hombres, para acompañarlos y ayudarlos con su presencia invisible pero bastante atentos.
Fiesta de los Santos Ángeles Custodios.
En las Sagradas Escrituras la palabra Ángel significa "Mensajero". Un espíritu purísimo que está cerca de Dios para adorarlo, y cumplir sus órdenes y llevar sus mensajes a los seres humanos.
Desde la niñez y hasta nuestro último aliento de vida, nuestra vida se encuentra envuelta por la maravillosa figura de estos seres guardianes o ángeles custodios. El Catecismo de la Iglesia Católica nos dice: "Cada fiel tiene a su lado un ángel como protector y pastor para conducirlo a la vida". Desde esta tierra, la vida cristiana participa, por la fe, en la sociedad bienaventurada de los ángeles y de los hombres, unidos en Dios. (Catecismo de la Iglesia Católica, 336)
Los Ángeles Custodios en las Escrituras.
Ya en el siglo II el gran sabio Orígenes decía: "Los cristianos creemos que a cada uno nos designa Dios un ángel para que nos guíe y proteja". Y se basa esta creencia en la frase del Salmo 90: "A sus ángeles ha dado órdenes Dios, para que te guarden en tus caminos".
Y en aquella otra frase tan famosa de Jesús: "Cuidad de no escandalizar a ninguno de estos pequeños, porque sus ángeles están siempre contemplando el rostro de mi Padre Celestial".
Y Judit en la Biblia, al ser recibida como libertadora de Betulia exclamaba: "El ángel del Señor me acompañó en el viaje de ida, en mi estadía allá, y en el viaje de venida".
En el Nuevo Testamento es tan viva la creencia de que cada uno tiene un ángel custodio, que cuando el Apóstol San Pedro al ser sacado de la cárcel llega a llamar a la puerta de la casa donde están reunidos los discípulos de Jesús, ellos creen al principio, que no es Pedro en persona y exclaman: "Será su ángel" (Hechos 12,15)
Ya en el año 800 se celebraba en Inglaterra una fiesta a los Ángeles Custodios y desde el año 1111 existe una oración muy famosa al Ángel de la Guarda. Dice así: "Ángel del Señor, que por orden de su piadosa providencia eres mi guardián, custódiame en este día (o en esta noche) ilumina mi entendimiento, dirige mis afectos, gobierna mis sentimientos, para que jamás ofenda a Dios Señor. Amén".
En el año 1608 el sumo pontífice extendió a toda la Iglesia universal la fiesta de los Santos Ángeles Custodios (Ángeles de la Guarda) y la colocó el día 2 de octubre.
Misión de los Ángeles Custodios.
La palabra griega "Angelos", o en hebrero "Malak", significa mensajero o ángel. Los ángeles son seres creados de forma pura y espiritual que cumplen la voluntad de Dios (Salmo 103.20).
Desde el principio de la Biblia, con el Génesis, hasta el último Libro del Apocalipsis, podemos encontrar la presencia de los Ángeles Custodios.
- Dios colocó querubines para proteger la entrada al Jardín del Edén después de Adán y Eva fueran expulsados. (Cfr. Génesis 3,24).
- Un ángel del Señor se le apareció a Moisés en medio de la zarza ardiente (Cfr. Éxodo 3,2)
- Dios envió un ángel para castigar al Rey David y a los israelitas, pero luego se arrepintió e impidió que el ángel destruyera Jerusalén, después de ver que el Rey David cayera arrepentido y pidió que fuese castigado él en vez de su pueblo (Cfr. 2 Samuel, 24,16-17).
- Cuando el profeta Elías huyó de Jezabel después de su triunfo en el Monte Carmelo, un ángel le trajo comida, dándole fuerza para encontrarse con el Señor en el Monte Horeb. No solo una vez ocurrió esto, sino dos veces. (Cfr. 1 Reyes 19,5-8).
- Un ángel restauró las fuerzas y vistió de fiesta al sumo sacerdote Josué (Cfr. Zacarías 3)
- En algunas otras ocasiones, podemos ver a los ángeles tomando forma humana. Esto puede verse en aquellos hombres que se le aparecieron a Abraham y a Lot. (Cfr. Génesis 18-19)
- El mismo San Rafael Arcángel, uno de los siete ángeles con acceso permanente al Trono de Dios, se le apareció en forma humana a Tobías para acompañarlo en el camino y darle la sanación a su padre ciego. (Cfr. Tobías 12,11-15)
- Daniel, mientras estuvo en la guarida del León, fue acompañado por la Presencia de un Ángel que Dios le envió para que los leones no le tocaran ni uno solo de sus cabellos. (Cfr. Daniel 19,23)
- San Gabriel Arcángel fue enviado a la bella doncella, la Virgen María, para anunciarle la Salvación (Cfr. Lucas 1,26-28)
La misión de los Ángeles de la Guarda es acompañar a cada hombre en el camino por la vida, cuidarlo en la tierra de los peligros de alma y cuerpo, protegerlo del mal y guiarlo en el difícil camino para llegar al Cielo.
Se puede decir que el Ángel de la Guarda es un compañero de viaje que siempre está al lado de cada hombre, en las buenas y en las malas. No se separa de él ni un solo momento. Está con él mientras trabaja, mientras descansa, cuando se divierte, cuando reza, cuando le pide ayuda y cuando no se la pide.
Cuando hablamos de los Santos Ángeles Custodios, podemos estar seguro de que, el Ángel de la Guarda asignado no se aparta de la persona de quien cuida, ni siquiera cuando pierde la gracia de Dios por el pecado. Por el contrario, él le prestará auxilio para enfrentarse con mejor ánimo a las dificultades de la vida diaria y a las tentaciones que se presentan en la vida.
Muchas veces se piensa en el Ángel de la guarda como algo infantil, pero no debía ser así, pues si pensamos que la persona crece y que con este crecimiento se tendrá que enfrentar a una vida con mayores dificultades y tentaciones, el ángel custodio resulta de gran ayuda.
Santo Tomás de Aquino y los Ángeles.
Santo Tomás de Aquino fue uno de los grandes teólogos de la Iglesia, y es conocido como el "Doctor Angélico" por sus escritos sobre los ángeles en su obra "Suma Teológica". Tomás de Aquino creía que los ángeles, siendo seres espirituales, influyen en la humanidad, iluminando los pensamientos de las personas con una idea.
Citando las Escrituras, Santo Tomás de Aquino nombró 9 coros de ángeles y que dividió en 3 grupos: la jerarquía más alta que está al lado de Dios, Serafines (Isaías 6,2), Querubines (Génesis 3,24, Ezequiel 10,1-22), y Tronos (Colosenses 1,16); la jerarquía media involucrada en el gobierno, Dominaciones (Colosenses 1,16), Virtudes (1 Pedro 3,22), y Poderes (Colosenses 1,16), y la tercera jerarquía involucrada en el trabajo, Principados (Colosenses 1,16), Arcángeles (Primera Tesalonicenses 4,16), y Ángeles.
Los Papas y los ángeles Custodios.
En una audiencia general realizada el 6 de agosto de 1986, nuestro querido San Juan Pablo II, habló sobre los Ángeles Custodios expresando lo siguiente: "En cuanto a criaturas de naturaleza espiritual, los ángeles están dotados de inteligencia y de libre voluntad, como el hombre, pero en grado superior a él, si bien siempre finito, por el límite que es inherente a todas las criaturas. Los ángeles son, pues, seres personales y, en cuanto tales, son también ellos, "imagen y semejanza" de Dios. La sagrada Escritura se refiere a los ángeles utilizando también apelativos no solo personales (como los nombres propios de Rafael, Gabriel, Miguel), sino también "colectivos" (como las calificaciones de: Serafines, Querubines, Tronos, Potestades, Dominaciones, Principados), así como realiza una distinción entre Ángeles y Arcángeles"...
El Papa Francisco, muy devoto de los Ángeles Custodios, nos dejó unas palabras de esperanzas a cada uno de nosotros, en una homilía de una Misa celebrada el 2 de octubre de 2014. Allí, el Santo Padre dijo: "Todos nosotros, según la tradición de la Iglesia, tenemos un Ángel de la Guarda con nosotros, que nos cuida, nos hace sentir las cosas. Cuántas veces hemos escuchado: "Pero, esto debería hacer así, esto no está bien, estate atento...": ¡muchas veces! Es la voz de nuestro compañero de viaje. Estar seguros de que el Ángel de la Guarda nos llevará al final de nuestra vida con sus consejos, y por esto hay que escuchar su voz".
Si conocemos la vida de muchos de los Santos de la Iglesia, nos damos cuenta de que ellos tuvieron un contacto de algún tipo con sus ángeles de la Guarda. Para el Padre Pío de Pietrelcina, era muy norma conversar con su ángel de la Guarda. De hecho, él creía que todos podían ver a los ángeles, ya que, desde muy niño, conversaba normalmente con estos seres espirituales.
San Francisco de Asís miró asombrado cómo del Cielo bajaba un Serafín a entregarle los estigmas de Cristo.
Santa Gema Galgani afirmaba que su ángel guardián era como un segundo Jesús. Ella le daba a conocer sus deseos y el de los demás. En sus sufrimientos ella lo quería siempre a su lado y le decía continuamente: "Querido Ángel: ¡Te amo tanto!".
Oración a los Ángeles Custodios.
A continuación, algunas cortas oraciones a los Santos Ángeles de la Guarda que puedes rezar en cualquier momento del día para pedir la asistencia de estos guardianes celestiales.
1. Oración al Ángel Custodio por un auxilio inmediato.
Ángel bondadoso y custodio mío, Tú vienes de lo alto del Cielo, de contemplar el rostro de Dios; Él es quien te ha enviado a cuidar de mí. Me refugio en este momento bajo tus alas para que aligeres mi camino, dirijas mis pasos y me abras el entendimiento para no dejar pasar los actos de amor en mi vida. No me dejes, Ángel de mi guarda, quédate siempre muy cerca de mí y defiéndeme contra el espíritu malo. Y, sobre todo, ven en mi auxilio en la última lucha de mi vida. Ven y libra mi alma de angustias, de modo que contigo, puede alabar, amar y contemplar la bondad de Dios para siempre jamás. Oh, poderosos Santos Ángeles Custodios, no dejen de brindarnos nunca su protección. Amén.
2. Oración tradicional al Ángel de la Guarda.
Ángel Custodio del Señor, que por orden de Su piadosa providencia, eres mi guardián, custódiame en este día, ilumina mi entendimiento, dirige mis afectos, gobierna mis sentimientos, para que jamás ofenda a Dios, nuestro Señor. Amén.
3. Oración al Ángel Custodio para invocar su protección.
Santo Ángel de la guarda, compañero de mi vida, tú que nunca me abandonas, ni de noche ni de día. Aunque tu espíritu sea invisible, sé que te encuentras a mi lado, sé que escuchas mis oraciones, y guías todos mis pasos. En las penumbras de la noche, defiéndeme del demonio. Oh Ángel de Dios, cúbreme bajos tus alas para que yo escuche tu dulce mensaje y que lo viva, que vaya tomado de tu mano hacia Dios, que me lo envía. Testigo de lo invisible, presencia del cielo amigo, gracias por tu fiel custodia, gracias por tu compañía. Amén.
4. Oración de invocación al Ángel Custodio.
Ángel de la Guarda, dulce compañía, no me desampares ni de noche ni de día. No me dejes solo que sin ti me perdería. Llévame en tus brazos con amor y alegría, hasta que descanse en los brazos de Jesús, José y María. Amén.
Sobre los Ángeles Custodios.
Aquí puedes tener más recursos sobre los Ángeles de la Guarda para que conozcas en profundidad sobre estos poderosos ángeles guardianes que nos cuidan en el camino hacia Dios.
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