San Wenceslao de Bohemia fue el hijo del rey de Bohemia: Apoyó decididamente a la Iglesia de Dios, gobernó con misericordia, patrono de la República Checa
San Wenceslao de Bohemia: Rey y mártir.
San Wenceslao de Bohemia, también llamado San Venceslao, fue el duque de Bohemia desde 921 hasta su asesinato en el año 935, nació cerca de Praga, y fue el hijo del duque Wratislaw. Su abuela fue la que le introdujo el amor al cristianismo. Su hermano menor, Boleslao el Cruel, fue cómplice en el asesinato de este noble amigo del pueblo. Su martirio y popularidad dieron lugar a una reputación de bondad heroica que dio como resultado su elevación a la santidad. Fue declarado póstumamente como un rey. Él es el santo patrono de Bohemia y de la República Checa.
Fiesta: 28 de septiembre.
Martirologio romano: San Wenceslao, mártir: duque de Bohemia, fue educado en la sabiduría divina y humana por Ludmila, su tía paterna. Aunque él fue muy estricto consigo mismo, sin embargo, era un hombre de paz en la administración del reino y misericordioso con los pobres y los redimió con el bautismo de la esclavitud de los paganos, quienes los tenían en venta en Praga. Después de enfrentarse a muchas dificultades gobernando a sus súbditos y educándolos en la fe, fue traicionado por su hermano Boleslav, quien lo mandó a asesinar en la iglesia en Stara Boleslav, en la República Checa, por hombres armados.
Biografía de San Wenceslao de Bohemia.
San Wenceslao, fue el hijo del rey de Bohemia, Ratislav, el joven príncipe nació en el 907, cerca de Praga. Su abuela, Santa Ludmila, se encargó de la educación de su nieto, inculcándole siempre el amor y servicio al Padre Celestial.
Cuando San Wenceslao de Bohemia era todavía muy joven, el santo perdió a su padre en una de las batallas contra los magiares; su madre asumió el poder e instauró (bajo la influencia de la nobleza pagana) una política anticristiana y secularista, que convirtió al pueblo en un caos total.
Ante esta terrible situación, su abuela trató de persuadir al príncipe para que asumiese el trono para salvaguardia del cristianismo, lo que provocó que los nobles la asesinaran al considerarla una latente amenaza para sus intereses.
Sin embargo, por desconocidas circunstancias, la reina fue expulsada del trono, y San Wenceslao de Bohemia fue proclamado rey por la voluntad del pueblo, y como primera medida, anunció que apoyaría decididamente a la Ley de la Iglesia de Dios.
San Wenceslao de Bohemia instauró el orden social al imponer severos castigos a los culpables de asesinato o de ejercer esclavitud y además gobernó siempre con justicia y misericordia. Comenzó a confiar en los sacerdotes misioneros católicos de Alemania y esto despertó resentimiento no solo entre sus súbditos paganos, sino también entre algunos checos.
En lugar del antiguo rito eslavo, San Wenceslao favoreció el rito latino, la cual ya no estaba siendo usado por falta de sacerdotes. Fue el fundador además de una rotonda consagrada a San Vito en el Castillo de Praga.
Traición familiar.
Por oscuros intereses políticos, Boleslao (que ambicionaba el trono de su hermano), invitó a San Wenceslao a su reino para que participara de los festejos del santo patrono y al terminar las festividades, Boleslao asesinó de una puñalada al santo rey.
El pueblo lo proclamó como mártir de la fe, y pronto la Iglesia de San Vito (donde se encuentran sus restos) se convirtió en centro de peregrinaciones. El Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Otto I, le otorgó el título de rey de manera póstuma.
San Wenceslao de Bohemia ha sido proclamado como el santo patrono del pueblo de Bohemia y hoy su devoción es tan grande que se le profesa también como Patrono de Checoslovaquia (República Checa).
Se dice que su hermano, quien reinó con vara de piedra durante casi cuatro décadas, tuvo un verdadero arrepentimiento por lo que había hecho a su hermano. Desde ese entonces, ayudó a difundir el cristianismo por todo su reino e instauró en Bohemia un culto de veneración a San Wenceslao.
Tradición sobre el martirio de San Wenceslao.
Al morir su padre Bratislao, los habitantes de Bohemia eligieron por duque a San Wenceslao. Por la gracia de Dios, era hombre de una fe íntegra. Auxiliaba a todos los pobres, vestía a los desnudos, alimentaba a los hambrientos, acogía a los peregrinos, conforme a las enseñanzas evangélicas.
San Wenceslao de Bohemia no toleraba que se cometiera injusticia alguna contra las viudas, amaba a todos los hombres, pobres y ricos, servía a los ministros de Dios, embellecía muchas iglesias.
Pero los hombres de Bohemia se ensoberbecieron y persuadieron a su hermano menor, Boleslao, diciéndole: «Wenceslao conspira con su madre y con sus hombres para matarte».
San Wenceslao de Bohemia acostumbraba a ir a todas las ciudades para visitar sus iglesias en el día de la dedicación de cada una de ellas. Entró, pues, en la ciudad de Boleslavia, un domingo, coincidiendo con la fiesta de los santos Cosme y Damián. Después de oír misa, quería regresar a Praga, pero Boleslao lo retuvo pérfidamente, diciéndole: "¿Por qué has de marcharte, hermano?"
A la mañana siguiente, las campanas tocaron para el oficio matutino. Wenceslao, al oír las campanas, dijo: "Loado seas, Señor, que me has concedido vivir hasta la mañana de hoy"
San Wenceslao de Bohemia se levantó y se dirigió al oficio matutino. Al momento, Boleslao lo alcanzó en la puerta. Wenceslao lo miró y le dijo: "Hermano, ayer nos trataste muy bien"
Pero el demonio, susurrando al oído de Boleslao, pervirtió su corazón; y, sacando la espada, Boleslao contestó a su hermano: "Pues ahora quiero hacerlo aún mejor"
Dicho esto, lo hirió con la espada en la cabeza. San Wenceslao de Bohemia, volviéndose a él, le dijo: "¿Qué es lo que intentas hacer, hermano?" Y, agarrándolo, lo hizo caer en tierra. Vino corriendo uno de los consejeros de Boleslao e hirió a Wenceslao en la mano.
Este, al recibir la herida, soltó a su hermano e intentó refugiarse en la iglesia, pero dos malvados lo mataron en la puerta. Otro, que vino corriendo, atravesó su costado con la espada.
San Wenceslao de Bohemia expiró al momento, pronunciando aquellas palabras: "A tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu". (Leyenda primera paleoslava, Edición M. Weingart, Praga, 1934).
Oración a San Wenceslao de Bohemia.
Dios nuestro, que impulsaste al santo mártir San Wenceslao de Bohemia a anteponer el reino de los cielos a un reino terrenal, concédenos, por su intercesión, que tengamos valor para dejar lo que nos impida unirnos a ti de todo corazón. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo. Amén.
Santos de la semana
Santa Judit, Heroína del Antiguo Testamento: Biografía
Santa Judit fue una mujer de fe que expuso valientemente su vida con tal de obtener la libertad para su patria Israel y la libertad para su santa religión
Santo Tomás Becket. Obispo y Mártir defensor de la fe
Santo Tomás Becket fue un fiel obispo obligado al destierro de Inglaterra por defender la Iglesia. Fue mártir que se dejó asesinar sin oponer resistencia
Sagrada Familia de Nazaret: Jesús, María y José
La Fiesta de la Sagrada Familia de Nazaret nos invita a vivir y proclamar la verdad y la belleza de la familia según el plan de Dios para los hogares
Biografía de Santos - Celebraciones y Fiestas de la Iglesia