Virgen de las Nieves: Abogada de los Matrimonios Devotos

Nuestra Señora de las Nieves es un título que se le da a la Santísima Virgen María y es una de las más antiguas devociones a la Madre de Dios. También se le conoce como la Virgen Blanca o la Virgen de las Nieves. Tiene vínculos directos con la tradición acerca de una maravillosa nevada ocurrida en Roma en el año 352. Por improbable que pueda parecer que una nevada caiga durante el mes de agosto, la tradición afirma que el 5 de agosto del año 352 cayó nieve durante la noche en Roma. Por la mañana, la noticia se difundió rápidamente y las multitudes se agolparon para subir a la colina y contemplar el blanco esplendor. La nieve había caído en un patrón particular, mostrando el contorno de la futura iglesia. Cuando se supo que la nieve era una señal de María, el pueblo añadió otro nombre a su larga lista de títulos, nuestra Señora de las Nieves.

Fiesta: 5 de agosto.

La devoción a María bajo el título de Nuestra Señora de las Nieves es una de las más antiguas devociones a María. Tiene lazos directos a con la tradición de una milagrosa nevada ocurrida en Roma en el año 352 D.C. en pleno día caluroso de verano. La Virgen María se había manifestado en sueños a una pareja de esposos perteneciente a la nobleza romana, y que eran unos muy devotos cristianos, pero no tenían hijos, y les dijo que Ella quería que se construyera una Iglesia en su honor y el sitio para construirla estaría completamente cubierto de nieve.

Nuestra Señora de las Nieves.

Alrededor del año 325 D.C., una pareja de esposos que vivían unas vidas muy piadosas y eran muy devotos de la Virgen, cerca de la ciudad de Roma, comenzaron a tener un sueño en común, que se repitió muchas veces: una hermosa mujer, a la que creían era la Santísima Madre de Dios, se les aparecía y les pedía que le fuera construido un templo en su honor.

Al igual que a ellos, la Santísima Virgen (Virgen de las Nieves), también comenzó a aparecerle en sueño al Papa Liberio con un mensaje idéntico al de los esposos devotos.

Este matrimonio decidió ir a buscar el obispo de Roma para que los ayudara a discernir el significado del sueño. El Papa les recomienda que esperen un poco más: que si se trataba de una aparición auténtica de la Madre de Dios, Ella les daría una señal inequívoca y prodigiosa

Para sorpresa de todos, un 5 de agosto, en pleno apogeo del calor de verano, una nieve maravillosa comenzó a caer en la Colina del Esquilino de Roma, cubriéndola completamente. Toda Roma comenzó a proclamar la nieve de verano como un milagro. Este milagro de la nieve fue interpretado como Dios mismo, afirmando lo que se había declarado el Concilio de Éfeso sobre la creencia de María como la "Theotokos", una palabra griega que significa "Madre de Dios".

Una basílica llamada "Santa María la Mayor" fue construida por el Papa Liberio (352-366) y fue dedicada el 5 de agosto de 451. A esta Basílica se le llama "Mayor", porque es la primera Iglesia en Occidente construida en honor a María.

Nuestra Señora de las Nieves es honrada debido a su papel especial en la Iglesia, que es, por su propia naturaleza, misionera.

La Reina Santa Helena y su hijo, el Emperador Constantino, llevaron a esta Basílica un gran tesoro Mariano - una imagen de la Virgen con el Niño conocida como la "Salus Populi, Romani" (La Protectora del Pueblo de Roma). Esta imagen es atribuida a San Lucas, el apóstol y evangelista.

Muchas curaciones y liberaciones de opresiones han sido acreditadas debido a la intervención milagrosa de Nuestra Señora de las Nieves.

Virgen de las Nieves y la lluvia de Rosas.

La Basílica de Santa María la Mayor ha celebrado la maternidad divina de María desde el Concilio de Éfeso en el año 432 D.C., cuando María fue proclamada por primera vez "Theotokos", Madre de Dios.

En la fiesta, que es celebrada cada 5 de agosto, hermosas rosas blancas son liberadas desde el techo de la Basílica hasta el santuario, como si fuese una especie de lluvia blanca, en memoria de la nevada que llevó a la construcción de la primera Iglesia dedicada a la Virgen de las Nieves.

Restaurada y reconstruida muchas veces, esta iglesia sigue en pie hoy en día como el asiento de la devoción a Nuestra Señora de las Nieves en la Iglesia Católica. El Papa San Pío V la declaró fiesta de la Iglesia universal en el siglo XVII

Nuestra Señora de las Nieves tiene una hermosa manera de hacer que sus intenciones sean conocidas, que no son otras que llevar a sus hijos al encuentro con Jesús, tal como lo hizo en las bodas de Caná (Juan 2,1-11)

Oración a Nuestra Señora de las Nieves.

Nuestra Señora de las Nieves, Inmaculada Reina del Universo, desde este santuario privilegiado, Tú nos has dado tantas innumerables gracias y promesas de amor en los corazones, las almas de millones de personas. Oh Madre, desde esta cuna del cristianismo, esta Iglesia madre de todas las iglesias, dígnate a derramar las gracias de tu corazón inmaculado sobre el remanente fiel en todo el mundo, dondequiera que nos encontremos, y concédenos las gracias de un amor filial y constante fidelidad a las santas verdades de nuestra fe. Concede, oh buena madre, a los fieles obispos de la Iglesia, la gracia de defender las sagradas enseñanzas, y a perseverar con valentía contra todos los enemigos de la Santa Iglesia. Amén.