Novena a San José Custodio. En el séptimo día pedimos ayuda para no perder el amor de Dios por el pecado mortal. Oraciones de la Novena a San José, día 7
Novena a San José Custodio. Día 7: Cuidarse del pecado mortal.
La Novena a San José nos prepara en el camino espiritual y que nos reafirma en la vida cristiana. La tradición sostiene que murió en presencia de Jesús y María. Por esta razón, San José es el santo patrono de la santa muerte. Para el séptimo día de la Novena a San José Custodio vamos a encomendar nuestras vidas, pensamientos, palabras y acciones, a San José, para que nos ayude a no caer en el pecado mortal que nos aleja del amor de Dios.
Conociendo a San José.
La Novena de San José ha sido muy recomendada hasta por los Papas de nuestros tiempos. Los Papas, a través de la historia de la Iglesia han reconocido la importancia de San José en el misterio de Salvación de Dios. El Papa Pío IX lo declaró el Patrono de la Iglesia Católica en 1870.
El Papa León XIII en "Quamquam Pluries" (1889) escribió: "San José fue el guardián, el administrador y el legítimo y natural defensor de la casa divina de la que él era la cabeza. Fue así, natural y muy digno de San José que, apoyó en todas las necesidades de la Familia de Nazaret que envolvió en su santa protección, ahora lo cubre con su patrocinio celestial y defiende la Iglesia de Jesucristo".
El Papa San Juan Pablo II en su exhortación apostólica "Redemptoris Custos" (Guardián del Redentor), escrita en 1989, exhortó a los fieles a mirar a San José en nuestra atribulada época:
"San José ha sido llamado por Dios para servir directamente a la persona y a la misión de Jesús mediante el ejercicio de su paternidad; de este modo él coopera en la plenitud de los tiempos en el gran misterio de la redención y es verdaderamente "ministro de la salvación" [21]. Su paternidad se ha expresado concretamente «al haber hecho de su vida un servicio, un sacrificio, al misterio de la encarnación y a la misión redentora que está unida a él; al haber hecho uso de la autoridad legal, que le correspondía sobre la Sagrada Familia, para hacerle don total de sí, de su vida y de su trabajo; al haber convertido su vocación humana al amor doméstico con la oblación sobrehumana de sí, de su corazón y de toda capacidad, en el amor puesto al servicio del Mesías, que crece en su casa". [22].".
Novena a San José custodio.
Cuando te dispongas a rezar el día 7 de la Novena a San José custodio, busca un lugar apacible y silencioso. Invocamos la poderosa presencia del Espíritu Santo y a los Ángeles custodios para que pueda meditar cada palabra que se recite en este séptimo día de la novena para que podamos estar claros en que es muy importante mantenernos en gracia de Dios y alejarnos del pecado mortal.
1. Oraciones iniciales de la Novena.
A continuación, para el séptimo día de la Novena a San José, disponemos el corazón al Señor y nos preparamos para esta novena en petición a Dios para que nos ayude a amar a Dios por sobre todas las cosas y alejarnos del pecado mortal.
Señal de la Cruz.
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de contrición.
Jesús, mi Señor y Redentor: Yo me arrepiento de todos los pecados que he cometido hasta hoy, y me pesa de todo corazón, porque con ellos, ofendí a un Dios tan bueno. Propongo firmemente no volver a pecar, y confió en que, por tu infinita misericordia, me has de conceder el perdón de mis culpas y me has de llevar a la vida eterna. Amén
Pida aquí la gracia que desea alcanzar.
2. Oración inicial de preparación.
Oh gloriosísimo Padre de Jesús, Esposo de María. Patriarca y Protector de la Santa Iglesia, a quien el Padre Eterno confió el cuidado de gobernar, regir y defender en la tierra la Sagrada Familia; protégenos también a nosotros, que pertenecemos, como fieles católicos, a la santa familia de tu Hijo que es la Iglesia, y alcánzanos los bienes necesarios de esta vida, y sobre todo los auxilios espirituales para la vida eterna. Alcánzanos especialmente estas tres gracias, la de no cometer jamás ningún pecado mortal, principalmente contra la castidad; la de un sincero amor y devoción a Jesús y María, y la de una buena muerte, recibiendo bien los últimos Sacramentos. Concédenos además la gracia especial que te pedimos cada uno en esta novena. Amén.
3. Oración del día 7 de la Novena a San José.
En el séptimo día de la Novena, pidamos a Dios esa fuerza para que, a través de San José, nos ayude a no perder nunca el amor de Dios, debido al pecado mortal.
Oh benignísimo Jesús, así como por seguir la voluntad de tu Padre celestial permitiste que tu amado padre en la tierra padeciese el vehementísimo dolor de perderte para tres días, así te suplicamos humildemente, por intercesión de San José, que antes queramos perder todas las cosas y disgustar a cualquier amigo, que dejar de hacer tu voluntad; que jamás te perdamos a ti por el pecado mortal, o que si por desgracia te perdiésemos te hallemos mediante una buena confesión
4. Oración final a San José custodio.
Oh custodio y padre de Vírgenes San José a cuya fiel custodia fueron encomendadas la misma inocencia de Cristo Jesús y la Virgen de las vírgenes María; por estas dos queridísimas prendas Jesús y María, te ruego y suplico me alcances, que preservado yo de toda impureza, sirva siempre castísimamente con alma limpia, corazón puro y cuerpo casto a Jesús y a María. Por el mismo Jesucristo, Nuestro Señor. Amén.
- Jesús, José y María, os doy mi corazón y el alma mía
- Jesús, José y María, asistidme en mi última agonía.
- Jesús, José y María, con Vos, descanse en paz el alma mía.
Rezar el Padrenuestro, Avemaría y Gloria en la oración final a San José Custodio.
Antífona. Tenía el mismo Jesús, al empezar su vida pública, cerca de treinta años, hijo, según se pensaba de José.
- V. San José, ruega por nosotros.
- R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Jesucristo.
5. Oración de entrega.
Oh Dios que con inefable providencia te dignaste escoger al bienaventurado San José, por Esposo de tu Madre Santísima; concédenos que, venerándolo como nuestro santo protector en la tierra, merezcamos tenerle como protector en los Cielos. Te lo pedimos, Oh Dios que vives y reinas en los siglos de los siglos. Amén.
Novena a San José custodio completa.
A continuación, puedes consultar todos y cada uno de los días de la Novena a San José Custodio y estar preparado para recibir las gracias que Dios quiere darnos a través de este querido santo protector de la Iglesia.
Con el día 7 de la Novena a San José Custodio, meditamos sobre el pecado mortal y cómo este puede alejarnos de la gracia y del amor de Dios. Nuestra fidelidad a Dios incluye no perder nunca de vista el foco de su amor, su luz y su Verdad. Cuando pecamos mortalmente, perdemos la Gracia de Dios que nos sostiene. Acudamos a la confesión de inmediato para restaurar esta gracia. Para el séptimo día de la Novena a San José Custodio, pedimos la gracia de amar a Dios por sobre todas las cosas que nunca jamás el pecado mortal nos separe de sus bendiciones. San José, ruega por nosotros.