Papa Francisco: El buen pastor sabe discernir el bien del mal

"Un pastor debe ser apasionado, debe saber discernir y debe saber cómo denunciar el mal. Al igual que el párroco de Barbiana, debemos cuidar del prójimo", estas fueron algunas de las palabras del Papa Francisco durante la Misa del jueves en la Casa Santa Marta, el 22 de junio 2017, donde se centró en la figura del Apóstol Pablo y luego dirigió su atención al ejemplo ofrecido por Don Milani.

Inspirándose en las Lecturas del Día y apuntando las características que un Buen Pastor debe tener, el Santo Padre expresó lo siguiente:"El Buen Pastor da la vida por sus ovejas. San Pablo es la figura del verdadero pastor, quien no abandona a sus ovejas, a diferencia de los mercenarios.

Al respecto, el Papa Francisco indicó que "la primera cualidad de San Pablo es que está lleno de pasión. Es apasionado hasta el punto de decirle a su pueblo: "Siento por todos ustedes una especie de celo divino". Él es divinamente celoso".

El verdadero pastor sabe discernir el mal.

La pasión es capaz de volverse en locura e insensatez para su pueblo. Y esto es lo que llamamos celo apostólico: No se puede ser un verdadero pastor sin este fuego.

Una segunda característica es que el Buen Pastor debe ser una persona que sepa discernir:

El Buen Pastor sabe lo que es la seducción en la vida: el padre de las mentiras es un seductor, el Buen Pastor no lo es, él ama, a diferencia del seductor, quien trata de apartar de la fidelidad. Los celos divinos de Pablo eran llevar a la gente a tener un solo "esposo", y mantener al pueblo leal a este "esposo".

En la historia de la salvación muchas veces nos alejamos de Dios mediante la deslealtad hacia el Señor y la idolatría, como si fuese una infidelidad maternal.

El buen pastor sabe denunciar el mal.

La primera característica del Pastor es ser apasionado y celoso. La segunda característica es ser alguien que sepa discernir: discernir dónde están los peligros, dónde están las gracias, dónde está el verdadero camino.

Esto significa que el Buen Pastor siempre acompañará a sus ovejas: en momentos hermosos, en momentos difíciles, e incluso en momentos de seducción, con paciencia los llevará al redil.

Y la tercera característica: La capacidad de denunciar. Un apóstol no puede ser ingenuo. "Ah, está bien, sigamos. Está bien. Vámonos de fiesta, todo el mundo, todo es posible", porque hay la fidelidad al único esposo, a Jesucristo, quien hay que defender.

Y el Buen Pastor sabe condenarlo: esa concreción, decir "no", así como dicen los padres sus bebés cuando descubren sus manos y se dirigen a la toma eléctrica a meter los dedos: ¡No, no, es peligroso! Siempre recuerdo esta exhortación que mis padres y abuelos solían decirme en momentos de peligro.

Cuiden de los demás.

El Papa Francisco aseguró a todos que "el Buen Pastor debe saber denunciar, por su nombre y apellido, como lo hizo el Apóstol San Pablo."

El Santo Padre volvió a su visita a Bozzolo y Barbiana, esta semana, refiriéndose a esos dos buenos pastores de Italia. Y hablando de Don Milani, recordó su lema cuando enseñaba "a sus muchachos":

"I care". ¿Pero qué significa esto?", se preguntó el Papa Francisco. "Me explicaron que él quería decir "me importa". Enseñaba que las cosas se debían tomar con seriedad, contra el lema de moda de aquel tiempo que era "no me importa", pero dicho de otra forma, que yo no me atrevo a decir aquí. Y así enseñaba a los muchachos seguir. Tengan cuidado: cuiden su vida", dijo el Papa.

El Papa Francisco dijo que "el celo apostólico de Pablo, era apasionado y celoso. El hombre sabe discernir porque conoce el poder de la seducción y sabe que el diablo seduce".

Así entonces, el Papa Francisco concluyó con una oración por todos los pastores de la Iglesia, por San Pablo que intercede ante el Señor y por todos nosotros, pastores servidores del Señor.