Ten fe y paciencia, con el poder de Dios saldrás adelante

Con el poder de Dios saldrás adelante. Ten fe y paciencia, que la paciencia todo lo alcanza y la fe te hace superar toda prueba que se te presente.

En el nuevo testamento, son muchos los versículos que encontramos donde aprendemos algunas formas de orar a Dios. San Pablo, por ejemplo, en su carta a los Filipenses, nos dice:

"No se angustien por nada, y en cualquier circunstancia, recurran a la oración y a la súplica, acompañadas de acción de gracias, para presentar sus peticiones a Dios". (Filipenses 4,6)

El Apóstol San Pablo, que escribió varios epístolas o cartas de ehortación a varias comunidades religiosas, a menudo comenzaba y terminaba sus cartas en oración por los santos. Específicamente, San Pablo hacía oración pidiendo por la gracia, la paz, el amor y la fe de Dios entre los creyentes.

San Pedro, nos exhorta también a poner todo nuestro cuidado en Dios, porque Él se preocupa por nosotros.

"Descarguen en Dios todas sus inquietudes, ya que Él se ocupa de ustedes". (1 Pedro 5,6)

Al Apóstol Santiago, primo hermano del Señor, dice que podemos orar y pedir sabiduría a Dios, pero esto debe hacerse con fe.

"Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, que la pida a Dios, y la recibirá, porque él la da a todos generosamente, sin exigir nada en cambio" (Santiago 1,5)

Nuestra oración, como vemos, debe estar llena de fe, manteniendo la esperanza en Aquel que no salvó en la Gracia y nos dió vida en abundancia.

Ten fe y paciencia, con el poder de Dios saldrás adelante.

No hay lugar en tu vida para perder nunca la fe ni la esperanza, porque Dios siempre te acompaña, te anima y te bendice. Él es capaz de encender la llama de fuego en tu corazón.

Permite que Dios sea ese Sol que irradie luz a toda tu vida y fuerza a tu espíritu, llene tu vida de alegría y que su paz llene tu corazón y te abrigue en donde quiera que te encuentres. Abre tu corazón a Dios y te aseguro que estarás disfrutando de todas esas bendiciones que Él quiere regalarte.

Que tu fe sea la llave que abra esas puertas a las respuestas que necesitas. Invita al Sagrado Corazón de Jesús a tu vida, decídete a ser optimista, a tener esperanza, a amar sin ataduras, a estar alegre en todo momento y creer que podrás salir adelante.

"Tenemos plena confianza de que Dios nos escucha si le pedimos algo conforme a su voluntad". (1 Juan 5,14)

Quizás no puedas cambiar las circunstancias, pero sí puedes cambiar tu manera de enfrentarlas, con fe y esperanza. Vale la pena dejarse sostener por Dios, Él es tu refugio, quien te da fortaleza.