Evangelio del día Jueves, Marcos 1,40-45: En seguida la lepra desapareció y quedó limpio

"En seguida la lepra desapareció y quedó limpio", es el mensaje central del Santo Evangelio de hoy jueves y reflexión con las Lecturas de hoy, 16 de enero, 2025. Evangelio del día explicado según San Marcos 1,40-45, con la Palabra diaria en el jueves de la Semana 1 del tiempo ordinario. "Rezar es atraer los ojos, atraer el corazón de Dios hacia nosotros". (Reflexión del Papa Francisco sobre el Evangelio del día de hoy)

En el Evangelio de hoy observamos que un leproso se acerca a Jesús con humildad y fe, creyendo en su poder para sanarlo: "Si quieres, puedes limpiarme". Este acto refleja una confianza absoluta en la voluntad divina, enseñándonos que la verdadera fe nos impulsa a buscar a Dios, incluso en medio de nuestras enfermedades y limitaciones o falta de esperanza. Presta atención a todas las lecturas del día de hoy.

Índice de lecturas.

Celebración del día:

San José Vaz: Abogado de los presos y de los enfermos

San José Vaz visitaba a los enfermos y a los cristianos en la cárcel: Se hizo pasar por mendigo para atender a todos los católicos perseguidos en Sri Lanka

Mensaje del Evangelio:

En seguida la lepra desapareció y quedó limpio (Cf. Marcos 1,40-45)

Lecturas de hoy jueves.

Hebreos 3,7-14: Anímense mutuamente cada día mientras dure este hoy.

Hermanos y hermanas: como dice el Espíritu Santo: Si hoy escuchan su voz, no endurezcan su corazón, como en el tiempo de la Rebelión, el día de la Tentación en el desierto, cuando sus padres me tentaron poniéndome a prueba, aunque habían visto mis obras durante cuarenta años. Por eso me irrité contra aquella generación, y dije: Su corazón está siempre extraviado y no han conocido mis caminos. Entonces juré en mi indignación: Jamás entrarán en mi Reposo. Tengan cuidado, hermanos, no sea que alguno de ustedes tenga un corazón tan malo que se aparte del Dios viviente por su incredulidad. Antes bien, anímense mutuamente cada día mientras dure este hoy, a fin de que nadie se endurezca, seducido por el pecado. Porque hemos llegado a ser partícipes de Cristo, con tal que mantengamos firmemente hasta el fin nuestra actitud inicial. Palabra de Dios.

Salmo de hoy.

Salmo 95(94): Si hoy oís su voz, no endurezcáis vuestros corazones. (R).

Venid, postrémonos en adoración; arrodillémonos ante el Señor que nos hizo. Porque él es nuestro Dios, y nosotros el pueblo que pastorea, el rebaño que guía. /R.

Oh, que hoy escuchéis su voz: "No endurezcáis vuestro corazón como en Meribá, como el día de Masa en el desierto, donde me tentaron vuestros padres; me pusieron a prueba aunque habían visto mis obras". /R.

Cuarenta años estuve cansado de aquella generación; dije: "El corazón de este pueblo se extravía, no conoce mis caminos". Por eso juré en mi furor: "Jamás entrarán en mi reposo". /R.

Evangelio de hoy.

Marcos 1,40-45: Se le quitó la lepra y quedó limpio.

En aquellos días, se le acercó a Jesús un leproso para pedirle ayuda y, cayendo de rodillas, le dijo: "Si quieres, puedes limpiarme". Jesús, conmovido, extendió la mano y lo tocó, diciendo: "Lo quiero, queda limpio". En seguida la lepra desapareció y quedó limpio. Jesús lo despidió, advirtiéndole severamente: "No le digas nada a nadie, pero ve a presentarte al sacerdote y entrega por tu purificación la ofrenda que ordenó Moisés, para que les sirva de testimonio". Sin embargo, apenas se fue, empezó a proclamarlo a todo el mundo, divulgando lo sucedido, de tal manera que Jesús ya no podía entrar públicamente en ninguna ciudad, sino que debía quedarse afuera, en lugares desiertos. Y acudían a él de todas partes. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Reflexión Papa Francisco.

Sobre el Evangelio de hoy, vemos que quien reza no teme molestar a Dios y nutre una confianza ciega en su amor de Padre. Confianza ciega, como la de los dos no videntes del pasaje del Evangelio, que gritan detrás de Jesús su necesidad de ser sanados. O como el ciego de Jericó, que invoca la intervención del Maestro con una voz más alta de quien quiere callarlo... Jesús nos ha enseñado a rezar como el amigo molesto que mendiga la comida a media noche, o como la viuda con el juez corrupto. No sé si quizá esto suena mal, pero rezar es un poco molestar a Dios, para que nos escuche... Es atraer los ojos, atraer el corazón de Dios hacia nosotros. Y esto lo han hecho también los leprosos que se le acercaron: "Si tú quieres, puedes curarme". Lo han hecho con una cierta seguridad. Así, Jesús nos enseña a rezar... (Homilía del Papa Francisco sobre el Evangelio de hoy)

Evangelio del día (video).

¿Qué mensaje tiene Dios para mí en el día de hoy? Escucha la meditación en audio del Evangelio de hoy jueves según San Marcos 1,40-45: "En seguida la lepra desapareció y quedó limpio", con el Padre Pedro Brassesco.

Pidamos ayuda al Espíritu Santo, para que nos ayude a meditar la reflexión de las lecturas de hoy jueves.

Coronilla a la Misericordia.

Une las enseñanzas del Evangelio al rezo de la Coronilla a la Divina Misericordia del día, por todas tus intenciones y todas nuestras necesidades.

Intenciones del día.

En el Evangelio de hoy jueves según San Marcos 1,40-45, leemos: "En seguida la lepra desapareció y quedó limpio". ¿Qué nos dice el Evangelio del día de hoy? La Palabra diaria nos llama a acercarnos a Jesús con fe y humildad, reconociendo nuestra necesidad de sanación, tanto física como espiritual.

¿Qué me dice este texto del Evangelio del día? ¿Cómo aplicaría a mi vida las lecturas de hoy? Escribe en los comentarios tus peticiones de oración que el Evangelio de hoy jueves haya podido suscitar en ti, o todas aquellas cosas que llevas guardadas dentro. Recuerda el mensaje de hoy del Evangelio del día, según San Marcos 1,40-45: "En seguida la lepra desapareció y quedó limpio". Hoy, se nos invita a reconocer a Jesús como el único que puede sanarnos en cuerpo y alma. La fe del leproso nos recuerda que debemos acercarnos al Señor con confianza, poniendo nuestras vidas en sus manos. Estaremos orando por tus intenciones.