Evangelio del Día Martes: ¿Cuántas veces tendré que perdonar a mi hermano?

Santo Evangelio de hoy explicado del martes, 14 de marzo, 2023 y las Lecturas de hoy para reflexionar. Palabra diaria con el Evangelio del día según San Mateo 18,21-35: "¿cuántas veces tendré que perdonar a mi hermano las ofensas que me haga?... Hasta setenta veces siete". Meditación del Evangelio (martes de la tercera semana de Cuaresma). Reflexión del Papa Francisco para hoy: "Quien ha experimentado la alegría, la paz y la libertad interior que da el perdón, debería abrirse a la posibilidad de perdonar a su vez"

Índice de lecturas de hoy.

Celebración del día:

Santa Matilde. Reina. Patrona de matrimonios y familias numerosas

La Reina Santa Matilde fue la fiel esposa del rey Enrique. Se distinguió por su humildad, paciencia y generosidad. Es la santa patrona de familias numerosas

Antífona de hoy.

A ti, oh Dios, te invoco, porque tú, ciertamente, me atiendes; vuelve a mí tu oído; escucha mis palabras. Guárdame como a la niña de tus ojos; a la sombra de tus alas protégeme. (Cfr. Salmo 16,6.8)

Oración colecta.

Que tu gracia no nos abandone, Señor, te lo pedimos, sino que nos haga dedicados a tu santo servicio y obtén siempre para nosotros tu ayuda. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

Lecturas de hoy martes.

Primera Lectura para el Evangelio de hoy martes. Lectura del Libro de Daniel 3,25.34-43: "Que nuestro sacrificio sea hoy para ti un alma contrita y un espíritu humillado".

Azarías, de pie en medio del fuego, tomó la palabra y oró a Dios así: "No nos abandones para siempre a causa de tu Nombre, no anules tu Alianza, no apartes tu misericordia de nosotros, por amor a Abraham, tu amigo, a Isaac, tu servidor, y a Israel, tu santo, a quienes prometiste una descendencia numerosa como las estrellas del cielo y como la arena que está a la orilla del mar. Señor, hemos llegado a ser más pequeños que todas las naciones, y hoy somos humillados en toda la tierra a causa de nuestros pecados. Ya no hay más en este tiempo, ni jefe, ni profeta, ni príncipe, ni holocausto, ni sacrificio, ni oblación, ni incienso, ni lugar donde ofrecer las primicias, y así, alcanzar tu favor. Pero que nuestro corazón contrito y nuestro espíritu humillado nos hagan aceptables como los holocaustos de carneros y de toros, y los millares de corderos cebados; que así sea hoy nuestro sacrificio delante de ti, y que nosotros te sigamos plenamente, porque no quedan confundidos los que confían en ti. Y ahora te seguimos de todo corazón, te tememos y buscamos tu rostro. No nos cubras de vergüenza, si no trátanos según tu benignidad y la abundancia de tu misericordia. Líbranos conforme a tus obras maravillosas, y da gloria a tu Nombre, Señor.

Salmo de hoy martes.

Salmo Responsorial de las lecturas de la Santa Misa de hoy, tomado del Salmo 25(24),4-6,7a-9

"Señor, acuérdate de tu misericordia". (R)

• Señor, hazme conocer tus caminos. Señor, enséñame tus caminos. Hazme caminar en tu verdad, y enséñame: porque tú eres Dios, mi salvador.

"Señor, acuérdate de tu misericordia". (R)

• En ti espero todo el día por tu bondad, Señor. Acuérdate de tu misericordia, Señor, y del amor que has manifestado desde siempre. No recuerdes los pecados de mi juventud. En tu amor, acuérdate de mí.

"Señor, acuérdate de tu misericordia". (R)

• El Señor es bueno y recto. Él muestra el camino a los extraviados, Él guía a los humildes por la senda recta, Él enseña su camino a los pobres.

"Señor, acuérdate de tu misericordia". (R)

Aclamación de hoy.

Gloria y alabanza a ti, Cristo. Dichosos los que con corazón noble y generoso toman para sí la palabra de Dios y producen una cosecha gracias a su perseverancia. ¡Gloria y alabanza a ti, oh Cristo!. (Aclamación del Evangelio de hoy tomado de Lucas 8,15)

Evangelio de hoy: Mateo 18,21-35.

Evangelio de hoy explicado - Lecturas de hoy martes, para el Santo Evangelio del día: "¿Cuántas veces tendré que perdonar a mi hermano? ¡Perdona, para que seas perdonado!".

En aquel tiempo, se adelantó Pedro y le preguntó a Jesús: "Señor, ¿cuántas veces tendré que perdonar a mi hermano las ofensas que me haga? ¿Hasta siete veces?". Jesús le respondió: "No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete. Por eso, el Reino de los Cielos se parece a un rey que quiso arreglar las cuentas con sus servidores. Comenzada la tarea, le presentaron a uno que debía diez mil talentos. Como no podía pagar, el rey mandó que fuera vendido junto con su mujer, sus hijos y todo lo que tenía, para saldar la deuda. El servidor se arrojó a sus pies, diciéndole: "Señor, dame un plazo y te pagaré todo". El rey se compadeció, lo dejó ir y, además, le perdonó la deuda. Al salir, este servidor encontró a uno de sus compañeros que le debía cien denarios y, tomándolo del cuello hasta ahogarlo, le dijo: "Págame lo que me debes". El otro se arrojó a sus pies y le suplicó: "Dame un plazo y te pagaré la deuda". Pero él no quiso, sino que lo hizo poner en la cárcel hasta que pagara lo que debía. Los demás servidores, al ver lo que había sucedido, se apenaron mucho y fueron a contarlo a su señor. Este lo mandó llamar y le dijo: "¡Miserable! Me suplicaste, y te perdoné la deuda. ¿No debías también tú de tener compasión de tu compañero, como yo me compadecí de ti?". E, indignado, el rey lo entregó en manos de los verdugos hasta que pagara todo lo que debía. Lo mismo hará también mi Padre celestial con ustedes, si no perdonan de corazón a sus hermanos". Palabra del Señor.

Reflexión del Papa Francisco.

"Quien ha experimentado la alegría, la paz y la libertad interior que da el perdón, debería abrirse a la posibilidad de perdonar a su vez". Papa Francisco.

Queridos hermanos y hermanas: ¡Buenos días! El pasaje del Evangelio de hoy (cf. Mt 18,21-35) nos ofrece una lección sobre el perdón que no niega el mal, sino que reconoce que el ser humano, creado a imagen de Dios, es siempre más grande que el mal que comete. San Pedro pregunta a Jesús "Señor, ¿cuántas veces pecará mi hermano contra mí, y yo le perdonaré? ¿Hasta siete veces?" (v. 21). A Pedro, perdonar siete veces a la misma persona ya le parecía lo máximo posible. Y quizá a nosotros nos parezca ya demasiado hacerlo dos veces. Pero Jesús responde: "No te digo siete veces, sino setenta veces siete" (v. 22), es decir, siempre. Hay que perdonar siempre. Y lo confirma contando la parábola del rey misericordioso y el siervo malvado, en la que muestra la incoherencia del hombre que primero fue perdonado y luego se negó a perdonar.

El rey de la parábola es un hombre generoso que, movido por la compasión, perdona una deuda enorme, "10.000 talentos": enorme, a un siervo que se lo suplica. Ese mismo siervo, sin embargo, en cuanto se encuentra con otro siervo como él, que le debe 100 denarios, que es mucho menos, se comporta de forma despiadada y hace que lo metan en la cárcel. El comportamiento incoherente del siervo es el mismo que el nuestro cuando nos negamos a perdonar a nuestros hermanos y hermanas. En cambio, el rey de la parábola es la imagen de Dios, que nos ama con un amor tan rico en misericordia que nos acoge, nos ama y nos perdona continuamente.

Desde el momento de nuestro Bautismo, Dios nos ha perdonado, liberándonos de una deuda insalvable: el pecado original. Pero esa es la primera vez. Después, con una misericordia sin límites, nos perdona todas nuestras faltas en cuanto mostramos el menor signo de arrepentimiento. Así es Dios: misericordioso. Cuando sintamos la tentación de cerrar nuestro corazón a quienes nos han ofendido y nos dicen que lo sienten, recordemos las palabras de nuestro Padre celestial al siervo malvado: "Te perdoné toda aquella deuda porque me lo pediste; ¿y no debías tú tener misericordia de tu consiervo, como yo tuve misericordia de ti?". (vv. 32-33). Quien ha experimentado la alegría, la paz y la libertad interior que da el perdón, debería abrirse a la posibilidad de perdonar a su vez.

Jesús quiso introducir la enseñanza de esta parábola en el Padre Nuestro. Relacionó el perdón que pedimos a Dios con el que debemos conceder a nuestros hermanos: "Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores" (Mt 6,12). El perdón de Dios es el símbolo de su amor "desbordante" por cada uno de nosotros. Es el amor que nos deja libres para distanciarnos, como al hijo pródigo, pero que espera nuestro regreso cada día. Es el amor lleno de recursos del pastor por la oveja perdida. Es la ternura que acoge a cada pecador que llama a su puerta. El Padre celestial, nuestro Padre, está colmado, está lleno de amor y quiere ofrecérnoslo, pero no puede hacerlo si cerramos nuestro corazón al amor hacia los demás.

Que la Virgen María nos ayude a ser cada vez más conscientes de la gratuidad y de la grandeza del perdón recibido de Dios, a ser misericordiosos como Él, Padre bueno, lento a la cólera y grande en el amor. (Homilía del Evangelio de hoy, 17 de septiembre de 2017)

Oración de hoy.

Señor, Tú sabes que, aun con nuestras fragilidades, podemos hacer las cosas bien, y por eso no dudas en concedernos nuevas oportunidades. Ayúdanos a corregir lo malo que habita en nuestro interior., eso que aún no ha sido sanado. Con tu Gracia, que podamos vernos libres de resentimientos, para así vivir libre de todo aquello que no le hace bien a nuestra alma. Ayúdame a amar como tú amas y a perdonar como tú perdonas. Amén. (Redacción: Qriswell Quero, servidor católico en Pildorasdefe.net)

Frase de reflexión.

"¿Qué quiere decir "corazón puro"? El corazón purificado es el resultado de un proceso que implica liberación y renuncia. El puro de corazón no nace así, sino que ha vivido una simplificación interior aprendiendo a rechazar el mal dentro de sí". (Papa Francisco, 1 de abril, 2020)

Reflexión del Evangelio de hoy.

Al meditar las lecturas y el Evangelio del día explicado, escuchemos ahora la meditación en audio del Santo Evangelio de hoy martes, según San Mateo 18,21-35: "¿Cuántas veces tendré que perdonar a mi hermano?".

Pidamos ayuda al Espíritu Santo, para que nos ayude a meditar lo que nos ha dicho a cada uno de nosotros, la reflexión del Evangelio de hoy.

Intenciones del día.

Reflexión del Santo Evangelio de hoy martes, 14 de marzo, 2023, según San Mateo 18,21-35: "¿cuántas veces tendré que perdonar a mi hermano las ofensas que me haga?... Hasta setenta veces siete". La oración del día nos ayuda con la meditación. ¿Qué pudiste reflexionar con el Evangelio del día? Escribe en los comentarios tus peticiones de oración.