La vida es un proyecto, con triunfos y fracasos, tropiezos y avances. Aprende cómo superar las frustraciones y vencer las dificultades
Seguramente habrás escuchado decir que "para ser un ganador, se deben superar las dificultades de la vida". Nadie gana una carrera en la vida sin realizar la carrera de la perseverancia.
Para ser un cristiano exitoso y victorioso en la vida, debes superar las batallas de cada día, desde la visión esperanzadora de Dios. La oración de fe es la clave para superar los obstáculos.
Las dificultades de la vida pueden definirse como cualquier cosa que se interponga en el camino hacia el cumplimiento de tus propósitos ordenado por Dios. Cada hombre que Dios creó fue creado para cumplir un propósito único y especial. Nadie fue creado para ser inútil, no lo digo yo, lo dice Dios en su Palabra:
"Porque yo conozco muy bien los planes que tengo proyectados sobre ustedes, oráculo del Señor: son planes de prosperidad y no de desgracia, para asegurarles un porvenir y una esperanza". (Jeremías 29,11)
El futuro de cada hijo de Dios es glorioso, pero no siempre es así. Muchos creyentes nunca tienen éxito o cumplen con su destino debido a la forma errada de enfrentar los obstáculos y dificultades que se les presentan. Estos obstáculos vienen en forma de grandes desafíos para sus vidas, experiencias negativas, reveses, decepciones y así sucesivamente.
Las dificultades no llegan a nuestra vida para distraernos de cumplir nuestro propósito. En sí mismos, también tienen un propósito para nosotros. Para que podamos superarlas, debemos usar estas dificultades a nuestro favor espiritual, y solo podemos hacerlo por el poder del espíritu de Dios a través de la oración.
Vencer las dificultades de la vida.
Desde una experiencia recogida en el portal de Aleteia, te traemos este ejemplo sobre cómo aprender a superar las dificultades que la vida nos trae a diario:
Fue un día en que mi estado de ánimo se agitó, se estremeció: Por un informe, me enteré de que uno de mis hijos, a pesar de la supervisión y apoyo, finalmente debe repetir año escolar.
- El banco me negó el crédito que tanto necesito.
- Un desconocido, huyó después de abollar mi coche, comprado con tanto esfuerzo.
- Al empezar la jornada laboral en la empresa en que trabajo, me entero de que la revisión anual de mi sueldo no tuvo el incremento esperado, después de haberme esforzado tanto.
Un largo día.
Brotaron en mi interior vientos huracanados que amenazaron con desestabilizar mi personalidad con sentimientos de depresión, angustia y agresividad con lo que puedo afectar más que a nadie, a mi familia.
Bien sé, que ante las difíciles realidades puedo reaccionar engañándome a mí mismo, derrumbándome. Puede suceder, si me dejo arrastrar hacia la desesperanza que provoca el ver solo el lado negativo de las cosas, como si las dificultades no fueran parte de la vida misma.
Si así sucede, entonces dejo que se conviertan en un zarpazo que me puede hacer verdadero daño, con el riesgo de que mi personalidad se deforme al ir cubriéndose de dolorosas cicatrices
Pero poco a poco, voy aprendiendo a tolerar mejor mis frustraciones, y más aún, aprovechándolas para superarme humanamente.
Ha sido un proceso del que guardo algunos recuerdos, como cuando de niño, por mi estatura, no pude alcanzar los dulces en lo alto de una alacena, entonces, en vez de buscar una silla o pedir ayuda, solo me tiré al suelo a llorar y patalear.
También, cuando de joven, vociferé y di de puntapiés a la puerta ya cerrada de un autobús que no pude alcanzar cuando emprendió la marcha, y, ante la perpleja mirada de los transeúntes, me puse a silbar fingiendo que no pasaba nada, y apenado, escurrí el bulto.
Me arrepentí avergonzado de mi reacción, dándome cuenta de que a la frustración de haber perdido el autobús, sumé otra: el sentimiento de no tener control sobre mis emociones.
Y me fui dando de golpes en la vida, hasta que decidí que lucharía por asumir las contrariedades, cualquiera que fuera la dimensión en que las percibiera; desactivándolas, y quitándoles su carga de ansiedad.
Así me di cuenta de que necesitaba formarme un carácter recio, templado. Me conocía y sabía bien por dónde empezar.
Lucharía negándome en lo placentero, fácil, cómodo; no rehuiría a los obstáculos grandes o pequeños; me esforzaría en superar mis defectos adquiriendo virtudes en aspectos muy concretos en lo cotidiano de mi vida.
Con esta nueva actitud, descubrí que mis frustraciones no siempre han tenido un origen externo. Nacían en mi intimidad por no aceptarme como era: ahí estaba mi estatura, mi talla; una incipiente calvicie; usar anteojos y audífonos; mi dificultad para el deporte, etc.
Realmente quería liberarme de todo eso.
Sin embargo, todo ello me llevó a tomar conciencia de mis propios límites, de mi libertad condicionada, de lo absurdo de tomarme tan en serio como si de un absoluto se tratara.
Comprendí así, que la verdadera liberación brota de asumir positivamente todo aquello que genera frustraciones. Dejé entonces de negarlas o evadirlas con artificios que tanto promueven los falsos profetas de la modernidad, que rehúye al dolor y las contrariedades por cualquier medio.
Una falsa liberación que niega que la vida sea milicia, que requiere de esfuerzo, disciplina, virtudes, y que el sabor de la misma, se obtiene al vencer las dificultades y contradicciones que se dan en un entretejido de tristezas, alegrías, éxitos y fracasos.
La vida es un proyecto que se convierte en realidad en la medida en que tropieza y choca, sin detenerse en la conquista de uno mismo; mejorando el temple y talante natural que existe dentro de nosotros.
La vida es así, y en cualquiera de sus circunstancias, por difíciles que sean, y aun cuando humanamente no se les encuentre una solución, siempre seremos libres, pues nos queda el divino recurso de elegir lo que no hemos elegido. Abrazándonos a la cruz sin perder la paz.
Oración para superar y vencer las dificultades.
La razón de realizar esta oración para superar las dificultades, es llenarnos de la fuerza del Espíritu Santo para no permitir que los obstáculos nos agobien. La oración puede que no cambie todo en nuestras vidas, pero puede cambiar nuestra actitud en CÓMO nos enfrentamos a estas situaciones.
Padre amado, antes que nada, te agradezco porque sé que estás allí, atento a mis ruegos, y siempre me respondes. Gracias por tu misericordia incondicional que me ha apartado de toda mala influencia en mi vida.
Si me mantengo fie a tus mandatos, podré superar cada una de las dificultades de la vida que esté evitando mi progreso espiritual y mis planes de realización personal
Purifica mi corazón de toda experiencia negativa que haya enfrentado en el pasado y que haya causado una herida emocional de miedo, y que se haya convertido en un obstáculo en mi interior.
Padre, me entrego a mí mismo de todos los fracasos y reveses del pasado que han afectado mi confianza y mis seguridades. Todo lo pongo en tus manos.
Rezo para que mi vida sea un testimonio de tu gracia y de amor. Dame la fuerza para soportar, el poder de vencer y la paz para estar contento en cualquier circunstancia. A ti, todo el honor y toda la Gloria, por los siglos de los siglos. Amén.
Rezo por ustedes este día, para que, habiendo realizado esta oración con fe por la superación de las dificultades, ningún obstáculo les haga caer en la vida. Dios les compañe.
Recursos sobre superación personal.