Cuando un cónyuge es defensivo o esconde su teléfono, por lo general es un síntoma de algún tipo de comportamiento poco saludable
Recientemente recibí un mensaje a través de mi página de Facebook de una esposa luchando con un problema muy común en los matrimonios modernos. Parafraseando su mensaje, ella me dijo:
"Mi esposo siempre tiene su teléfono celular con él. A veces, incluso duerme con él en el bolsillo. Él nunca quiere que lo mire. Me temo que se está comunicando con otras mujeres o escondiendo otra cosa, pero no quiero husmear o hacer las cosas incómodas exigiendo mirar su teléfono. Se pone tan defensivo cuando lo menciono. Estoy con el corazón roto, pero me siento atrapada, y no sé qué se supone que debo hacer para mejorar la situación. ¿Estoy siendo demasiado sensible o es él quien está fuera de límites?"
A través de los años, mi esposa Ashley y yo hemos interactuado con innumerables parejas casadas, y una tendencia que hemos descubierto es que la forma en que una pareja maneja sus teléfonos celulares revela mucho sobre la salud general de su matrimonio. Permíteme explicar...
Cuando un cónyuge es defensivo o esconde su teléfono, por lo general es un síntoma de algún tipo de comportamiento poco saludable. No siempre es infidelidad, aunque ciertamente quien tiene contraseñas en su teléfono comúnmente mantiene interacciones inadecuadas con el sexo opuesto.
Cuando no le das a tu cónyuge acceso completo a tu teléfono, practicamente le estás diciendo:
"No te estoy dando acceso completo a mí mismo. Hay secretos que no quiero decirte, comportamientos que no quiero revelar ante ti o actividades que no quiero compartir contigo".
Quizás creas con orgullo que tienes el derecho de guardar secretos a tu cónyuge, pero cualquier forma de engaño o secreto en un matrimonio es tóxica.
Las parejas más saludables valoran la transparencia sobre la privacidad personal.
Los secretos traen descofianza y desunión.
Cuando un cónyuge opera en secreto, crea desconfianza y desunión en el matrimonio. Esto va en contra de la definición misma del matrimonio.
Como cristiano, creo que el matrimonio fue idea de Dios y sus instrucciones atemporales para el convenio sagrado sigue siendo el mejor plan.
La Biblia nos dice que en el primer matrimonio estaban: "desnudos y no sentían vergüenza".
Este sencillo versículo en Génesis revela el poder de un "matrimonio desnudo". Es un vínculo de completa transparencia y confianza con la desnudez (física, emocional y espiritualmente) sin nada que esconderse el uno del otro. Es el tipo de intimidad que todos anhelamos, pero se necesita valor y vulnerabilidad para lograrlo.
Las parejas y los celulares en el matrimonio.
El secreto es enemigo de la intimidad. Cada relación saludable se fundamenta en la honestidad y la confianza.
La manera en que te relacionas con tu teléfono inteligente, puede ser el inicio de la construcción de este tipo de intimidad y transparencia mediante la toma de la "Garantía de Cero Secretos" en tu matrimonio.
Es una promesa de transparencia total, incluyendo contraseñas compartidas y nada que ocultar entre sí.
Mi esposa conoce las contraseñas de cada dispositivo y cuenta que tengo, porque si es "mío", ¡ella también lo posee! Darle acceso total a mi teléfono es una de las 7 "reglas" que sigo para promover la transparencia y prevenir la infidelidad en mi matrimonio.
Por lo tanto, si realmente no tienes nada que ocultar a tu cónyuge, dale la seguridad y la comodidad de saber que tiene acceso completo a tu teléfono (y todo lo demás).
No hagas que él o ella tengan que preguntar. Sé proactivo acerca de promover la transparencia en tu matrimonio.
Si estás escondiendo algo, sácalo a la luz. Una verdad dolorosa es siempre mejor que una mentira oculta.
Tu matrimonio es más importante que tu teléfono.
Teniendo conocimento de por qué el ocultar tu celular a tu cónyuge es perjudicial para tu matrimonio, entonces comienza a transparentar tu relación. Si te ha servido este artículo, por favor compártelo.
